Conoce tus derechos (I): Cómo comportarse antes y durante un juicio. Incluye bonus: elegir abogado
Cuando el ciudadano particular no familiarizado con el mundillo acude por primera vez a un juicio, se sorprende de cojones. El abogado no pasea. No hay discursos épicos ni retóricas preguntas. Por lo general, el abogado lee (lo cual es un error, pero en el derecho a la práctica le encanta sodomizar a la teoría). El juez no tiene un mazo, no grita “Orden, orden”, no hay un ordenanza armado, no se jura sobra la Biblia, ni testigos ni acusados se sientan al lado del juez y, por lo general, el juicio es aburrido y sin pasión. Y sus Señorías no llev