La Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) del organismo internacional acusó el viernes a Israel de utilizar tácticas “de guerra” en Cisjordania en medio de un aumento de los asesinatos y de los ataques de los colonos desde que comenzó la recolección de aceitunas la semana pasada. Nueve personas fueron asesinadas por las fuerzas israelíes entre el 8 y el 14 de octubre, según ha informado la OCHA.
También registró 32 ataques de colonos desde principios de octubre contra palestinos y sus propiedades relacionadas con la cosecha de aceitunas. En total, unos 600 olivos de crecimiento lento han sido quemados, vandalizados o robados por colonos, dijo la agencia.
En el incidente de más alto perfil hasta la fecha, Hanan Abd Rahman Abu Salameh, una mujer de 59 años, fue asesinada el jueves mientras recogía aceitunas en Faqqua, cerca de Yenín, por un soldado que le disparó unos 10 tiros.
Munir Barakat, miembro del consejo de la aldea de Faqqua, dijo al periódico israelí Haaretz que el personal de las Fuerzas de Defensa de Israel vino a recoger detalles sobre el tiroteo, pero no expresó esperanzas en la voluntad o capacidad del ejército para investigar. El año pasado, menos del 1% de las quejas contra soldados israelíes terminaron en una condena, según el informe anual de derechos humanos del Departamento de Estado de Estados Unidos.
“La familia y todo el mundo saben que esto no significa que nadie vaya a asumir la responsabilidad por el asesinato de una mujer inocente, una madre y una abuela cuyo único delito fue salir a recoger aceitunas”, dijo a Haaretz.
Un portavoz de OCHA, Jens Laerke, dijo: “Es, francamente, muy preocupante que no se trate sólo de ataques a personas, sino también de ataques a sus olivares. La cosecha de aceitunas es un sustento económico para decenas de miles de familias palestinas en Cisjordania”. Dijo que las agencias de la ONU estaban evaluando cómo podían ayudar a los palestinos.
Las aceitunas son el producto agrícola más importante de Cisjordania y, según la Unión de Agricultores Palestinos, pueden aportar a los agricultores un total de 70 millones de dólares (55 millones de libras esterlinas) al año. Se estima que entre una cuarta parte y una tercera parte de la población palestina de Cisjordania trabaja con los árboles o sus productos, como el aceite y el jabón.
Antes del ataque de Hamas del 7 de octubre del año pasado, la cosecha de aceitunas en las zonas de Cisjordania bajo control israelí estaba coordinada en su mayor parte por las autoridades palestinas locales y el ejército israelí para permitir a los agricultores llegar a sus árboles en fechas específicas. Sin embargo, en las dos últimas cosechas, los palestinos afirman que el acceso a sus propias tierras se ha visto severamente limitado.
La violencia en Cisjordania ha aumentado en paralelo con la guerra en Gaza durante los últimos 12 meses. Decenas de israelíes también han muerto en ataques callejeros palestinos.
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También registró 32 ataques de colonos desde principios de octubre contra palestinos y sus propiedades relacionadas con la cosecha de aceitunas. En total, unos 600 olivos de crecimiento lento han sido quemados, vandalizados o robados por colonos, dijo la agencia.
En el incidente de más alto perfil hasta la fecha, Hanan Abd Rahman Abu Salameh, una mujer de 59 años, fue asesinada el jueves mientras recogía aceitunas en Faqqua, cerca de Yenín, por un soldado que le disparó unos 10 tiros.
Munir Barakat, miembro del consejo de la aldea de Faqqua, dijo al periódico israelí Haaretz que el personal de las Fuerzas de Defensa de Israel vino a recoger detalles sobre el tiroteo, pero no expresó esperanzas en la voluntad o capacidad del ejército para investigar. El año pasado, menos del 1% de las quejas contra soldados israelíes terminaron en una condena, según el informe anual de derechos humanos del Departamento de Estado de Estados Unidos.
“La familia y todo el mundo saben que esto no significa que nadie vaya a asumir la responsabilidad por el asesinato de una mujer inocente, una madre y una abuela cuyo único delito fue salir a recoger aceitunas”, dijo a Haaretz.
Un portavoz de OCHA, Jens Laerke, dijo: “Es, francamente, muy preocupante que no se trate sólo de ataques a personas, sino también de ataques a sus olivares. La cosecha de aceitunas es un sustento económico para decenas de miles de familias palestinas en Cisjordania”. Dijo que las agencias de la ONU estaban evaluando cómo podían ayudar a los palestinos.
Las aceitunas son el producto agrícola más importante de Cisjordania y, según la Unión de Agricultores Palestinos, pueden aportar a los agricultores un total de 70 millones de dólares (55 millones de libras esterlinas) al año. Se estima que entre una cuarta parte y una tercera parte de la población palestina de Cisjordania trabaja con los árboles o sus productos, como el aceite y el jabón.
Antes del ataque de Hamas del 7 de octubre del año pasado, la cosecha de aceitunas en las zonas de Cisjordania bajo control israelí estaba coordinada en su mayor parte por las autoridades palestinas locales y el ejército israelí para permitir a los agricultores llegar a sus árboles en fechas específicas. Sin embargo, en las dos últimas cosechas, los palestinos afirman que el acceso a sus propias tierras se ha visto severamente limitado.
La violencia en Cisjordania ha aumentado en paralelo con la guerra en Gaza durante los últimos 12 meses. Decenas de israelíes también han muerto en ataques callejeros palestinos.