Con 321 incidentes, la provincia de Ramallah y el-Bireh registró el mayor número de ataques de colonos, seguida de 319 incidentes en Nablus y 298 en Hebrón.
El mayor número de ataques de colonos en el último año se produjo en octubre de 2023, con 233 incidentes que provocaron muertes o daños materiales.
Después de los ataques liderados por Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023, el ministro de Seguridad Nacional de extrema derecha, Itamar Ben-Gvir, distribuyó rifles semiautomáticos y otras armas a colonos e israelíes de extrema derecha, que ahora se están utilizando contra los palestinos.
Desde entonces, se han distribuido más de 120.000 armas de fuego entre los colonos israelíes, mientras que decenas de miles más han recibido aprobaciones condicionales.
"Tenemos la intención de seguir armando a Israel. Eso es lo que hicimos y eso es lo que seguiremos haciendo", dijo Ben-Gvir en su cuenta X.
En relación con la violencia que se está desatando en Cisjordania, las Naciones Unidas afirmaron que “podría empeorar dramáticamente si [las fuerzas de seguridad israelíes] siguen utilizando sistemáticamente la fuerza letal ilegal e ignoran la violencia perpetrada por los colonos”.
Expansión de los asentamientos israelíes
Los asentamientos israelíes son comunidades judías construidas en tierras palestinas que han sido arrebatadas por la fuerza a sus propietarios.
Alrededor de 700.000 colonos israelíes viven en al menos 250 asentamientos y puestos de avanzada en Cisjordania y Jerusalén Oriental ocupada.
Después del 7 de octubre de 2023, los colonos se sintieron particularmente conmovidos por miembros de extrema derecha del gobierno israelí, como Ben-Gvir y el ministro de Finanzas Bezalel Smotrich, ambos colonos que han respaldado la expansión de los asentamientos en la Cisjordania ocupada.
En marzo, Israel aprobó la construcción de unas 3.500 nuevas unidades de vivienda, que se suman a las casi 20.000 aprobadas el año pasado. Miles de personas se ven obligadas a abandonar sus hogares
El año pasado, unos 4.555 palestinos fueron desplazados en Cisjordania después de que las fuerzas israelíes demolieran sus hogares.
Las fuerzas israelíes demolieron, confiscaron o sellaron al menos 1.768 estructuras, incluidas 390 en Tulkarem, 368 en Jerusalén y 242 en Yenín.
Desde que Israel comenzó su guerra contra Gaza, que ha matado a más de 42.000 personas, al menos 744 palestinos, incluidos 164 niños, han muerto en Cisjordania.
Más de 6.250 personas han resultado heridas.
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El mayor número de ataques de colonos en el último año se produjo en octubre de 2023, con 233 incidentes que provocaron muertes o daños materiales.
Después de los ataques liderados por Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023, el ministro de Seguridad Nacional de extrema derecha, Itamar Ben-Gvir, distribuyó rifles semiautomáticos y otras armas a colonos e israelíes de extrema derecha, que ahora se están utilizando contra los palestinos.
Desde entonces, se han distribuido más de 120.000 armas de fuego entre los colonos israelíes, mientras que decenas de miles más han recibido aprobaciones condicionales.
"Tenemos la intención de seguir armando a Israel. Eso es lo que hicimos y eso es lo que seguiremos haciendo", dijo Ben-Gvir en su cuenta X.
En relación con la violencia que se está desatando en Cisjordania, las Naciones Unidas afirmaron que “podría empeorar dramáticamente si [las fuerzas de seguridad israelíes] siguen utilizando sistemáticamente la fuerza letal ilegal e ignoran la violencia perpetrada por los colonos”.
Expansión de los asentamientos israelíes
Los asentamientos israelíes son comunidades judías construidas en tierras palestinas que han sido arrebatadas por la fuerza a sus propietarios.
Alrededor de 700.000 colonos israelíes viven en al menos 250 asentamientos y puestos de avanzada en Cisjordania y Jerusalén Oriental ocupada.
Después del 7 de octubre de 2023, los colonos se sintieron particularmente conmovidos por miembros de extrema derecha del gobierno israelí, como Ben-Gvir y el ministro de Finanzas Bezalel Smotrich, ambos colonos que han respaldado la expansión de los asentamientos en la Cisjordania ocupada.
En marzo, Israel aprobó la construcción de unas 3.500 nuevas unidades de vivienda, que se suman a las casi 20.000 aprobadas el año pasado. Miles de personas se ven obligadas a abandonar sus hogares
El año pasado, unos 4.555 palestinos fueron desplazados en Cisjordania después de que las fuerzas israelíes demolieran sus hogares.
Las fuerzas israelíes demolieron, confiscaron o sellaron al menos 1.768 estructuras, incluidas 390 en Tulkarem, 368 en Jerusalén y 242 en Yenín.
Desde que Israel comenzó su guerra contra Gaza, que ha matado a más de 42.000 personas, al menos 744 palestinos, incluidos 164 niños, han muerto en Cisjordania.
Más de 6.250 personas han resultado heridas.