El gobierno ideal, el de quienes no quieren gobernar
¿Y si el gobierno ideal fuera el gobierno de quienes no quieren gobernar? Un gobierno así nos aseguraría honestidad, trabajo desinteresado y vocación en servir a la comunidad. Es un error común pensar que los que ahora están son corruptos pero que uno mismo jamás lo sería, que los demás no saben pero que uno mismo sí sabría. Todo eso es fruto del sesgo cognitivo de superioridad a la media según el cual tendemos a creernos más sabios que el resto, mejores personas que el resto, más limpios, menos corruptibles pero… ¿lo somos de verdad?