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Según anunció el ejército ese mismo día, “objetivos terroristas” pertenecientes a la milicia de Hezbollah también estaban siendo atacados en el valle de Bekaa, en el este del país. No se dieron detalles en el mensaje en el canal Telegram del ejército. La milicia Hezbolá, por su parte, negó en un comunicado que hubiera depósitos de armas en los edificios atacados. El ejército de Israel también dijo que había matado al comandante de la unidad de misiles de Hezbollah, Mohammed Ali Ismail, y a su adjunto, Hussein Ahmed Ismail, en ataques en el sur, así como al jefe de la red Hamas en el sur de Siria, Ahmed Mohammed Fahd. Fahd fue responsable de disparar cohetes contra los Altos del Golán anexados por Israel.

Mientras tanto, las sirenas de advertencia volvieron a sonar en el norte de Israel, anunció el ejército. Según el ejército, anteriormente se habían reanudado los bombardeos desde el Líbano. Por la mañana, un misil tierra-tierra cayó en un área abierta en el centro de Israel. Según medios israelíes, la bala impactó en el mar.

Los rebeldes en Siria celebran la muerte de Nasrallah

Israel lanzó el viernes uno de los ataques más fuertes desde el inicio del conflicto. Según el ejército el sábado por la mañana, el jefe de Hezbollah, Nasrallah, también fue asesinado. El líder de Hezbollah no ha estado disponible desde el ataque israelí en el sur de Beirut el viernes, según una persona familiarizada con el asunto, dijo la fuente a la agencia de noticias Reuters.

Hezbollah no no ha comentado oficialmente hasta la tarde del Sábado sobre el paradero de Nasrallah. Antes, la agencia de noticias iraní Tasnim informó que Nasrallah estaba a salvo. Los círculos del gobierno iraní dijeron que Teherán estaba revisando su estatus. A media tarde Hezbollah terminó certificando oficialmente la muerte de su líder. En la vecina Siria, la población de la última gran zona rebelde de Idlib ya celebraba su muerte desde horas antes.

Numerosos muertos y heridos

Mientras tanto, continúa la búsqueda de supervivientes tras el intenso ataque aéreo israelí en un suburbio de Beirut. Varios edificios fueron destruidos en el suburbio densamente poblado de Haret Hreik, informó la agencia estatal de noticias NNA. Como resultado, podrían producirse decenas o incluso cientos de muertes, se dijo.

Según cifras oficiales de las autoridades libanesas, más de 700 personas han muerto desde que comenzó la última escalada. La televisión al-Manar de Hezbollah informó que siete edificios fueron destruidos. Miles de personas abandonaron sus hogares en el sur de Beirut después de que el ejército israelí solicitara evacuaciones.
Estados Unidos ajusta sus fuerzas armadas

El presidente estadounidense, Joe Biden, ordenó al Pentágono que evaluara la posición de las fuerzas estadounidenses en Medio Oriente y hiciera ajustes si fuera necesario. La Casa Blanca lo anunció el viernes (hora local) tras los ataques israelíes en Beirut. Además, las embajadas de Estados Unidos en la región deberían "tomar todas las medidas de protección apropiadas", afirmó.

Mientras tanto, el Ministro de Asuntos Exteriores iraní, Abbas Araghchi, acusó a Israel de utilizar bombas estadounidenses en Beirut. Se dice que allí se utilizaron varias bombas estadounidenses "destructoras de búnkeres". "Esta misma mañana, el régimen israelí utilizó varias bombas tipo búnker de 5.000 libras que le regaló Estados Unidos para atacar zonas residenciales en Beirut", dijo en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Oriente Medio.

Ataque poco después del discurso de la ONU

El último bombardeo se produjo pocas horas después de que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijera el viernes ante la Asamblea General de la ONU que su país tenía derecho a continuar con los ataques. “Mientras Hezbollah elija el camino de la guerra, Israel no tiene otra opción. "Israel tiene todo el derecho a eliminar esta amenaza y devolver a sus ciudadanos sanos y salvos a sus hogares", dijo Netanyahu.

Varias delegaciones abandonaron la sala mientras Netanyahu tomaba el podio mientras sus seguidores vitoreaban en las gradas.

Más tarde interrumpió su viaje a Estados Unidos antes de tiempo para regresar a Israel.

Guterres advierte sobre estallido bélico regional.

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, advirtió urgentemente contra una expansión del conflicto. "La guerra en el Líbano podría conducir a una mayor escalada que involucre a potencias externas", dijo en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU en Nueva York. "Debemos evitar una guerra regional a toda costa".

Según la ONU, decenas de miles de personas ya han huido hacia Siria y otros lugares del líbano desde que comenzaron los graves ataques israelíes en el Líbano.
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