El primer ministro interino libanés, Najib Mikati, dijo que Estados Unidos y Francia deberían presionar a Israel para que complete su retirada más rápidamente.
Estados Unidos y Francia, junto con Líbano, Israel y la FPNUL, forman el comité encargado de mantener la comunicación entre las partes del alto el fuego y asegurar que se identifiquen y aborden las violaciones.
Como parte del acuerdo de tregua, el ejército libanés y las fuerzas de paz se desplegarán en el sur del Líbano mientras el ejército israelí se retira en un período de 60 días.
"Para que el ejército pueda cumplir plenamente sus misiones, el comité debe... presionar al enemigo israelí para que ponga fin a todas las violaciones" del alto el fuego, dijo el primer ministro Najib Mikati en la ciudad de Khiam durante una gira por el sur.
"Es necesario presionar a las partes en el acuerdo de alto el fuego, es decir, a los franceses y a los estadounidenses, para que aceleren el proceso antes de que expire el plazo de 60 días", añadió, acusando a continuación a Israel de "dar largas".
El 11 de diciembre, el ejército libanés informó de que se había desplegado en torno a Khiam, a cinco kilómetros de la frontera, en coordinación con la FPNUL, tras la retirada de las tropas israelíes de la zona.
Acusaciónes de violaciones del Alto el Fuego
La Agencia Nacional de Noticias del Líbano (NNA) informó el lunes que "el enemigo israelí continúa su invasión y sus ataques en los territorios del sur del Líbano", donde ha "izado la bandera israelí" en una colina entre las ciudades de Bayada y Naqura.
La NNA informa con frecuencia de casos en los que Israel dinamita casas en pueblos fronterizos.
Por su parte, el ejército israelí declaró el lunes que continuaba sus "actividades defensivas" en el sur "de conformidad con el acuerdo", añadiendo que había "incautado y desmantelado varias armas y equipos militares de un almacén".
La tregua en el sur del Líbano entró en vigor el 27 de noviembre después de más de un año de hostilidades transfronterizas entre Israel y Hezbolá que comenzaron con el estallido de la guerra en Gaza.
Los intercambios de fuego finalmente escalaron hasta convertirse en una guerra total y la entrada de tropas israelíes en el sur del Líbano.
Desde que entró en vigor la tregua, ambas partes se han acusado mutuamente de reiteradas violaciones.
Mikati dijo que quería resolver cualquier cuestión relacionada con la Línea Azul -la frontera marcada por la ONU entre Líbano e Israel- "para que no haya justificación para ninguna ocupación israelí de nuestra tierra".
También dijo que estaba trabajando con "el Banco Mundial, la Unión Europea, los países árabes y nuestros socios internacionales para crear un fondo fiduciario" para los esfuerzos de reconstrucción.
El Banco Mundial estimó en octubre que los combates habían causado daños físicos por un valor de "al menos 3.400 millones de dólares" en Líbano.
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Estados Unidos y Francia, junto con Líbano, Israel y la FPNUL, forman el comité encargado de mantener la comunicación entre las partes del alto el fuego y asegurar que se identifiquen y aborden las violaciones.
Como parte del acuerdo de tregua, el ejército libanés y las fuerzas de paz se desplegarán en el sur del Líbano mientras el ejército israelí se retira en un período de 60 días.
"Para que el ejército pueda cumplir plenamente sus misiones, el comité debe... presionar al enemigo israelí para que ponga fin a todas las violaciones" del alto el fuego, dijo el primer ministro Najib Mikati en la ciudad de Khiam durante una gira por el sur.
"Es necesario presionar a las partes en el acuerdo de alto el fuego, es decir, a los franceses y a los estadounidenses, para que aceleren el proceso antes de que expire el plazo de 60 días", añadió, acusando a continuación a Israel de "dar largas".
El 11 de diciembre, el ejército libanés informó de que se había desplegado en torno a Khiam, a cinco kilómetros de la frontera, en coordinación con la FPNUL, tras la retirada de las tropas israelíes de la zona.
Acusaciónes de violaciones del Alto el Fuego
La Agencia Nacional de Noticias del Líbano (NNA) informó el lunes que "el enemigo israelí continúa su invasión y sus ataques en los territorios del sur del Líbano", donde ha "izado la bandera israelí" en una colina entre las ciudades de Bayada y Naqura.
La NNA informa con frecuencia de casos en los que Israel dinamita casas en pueblos fronterizos.
Por su parte, el ejército israelí declaró el lunes que continuaba sus "actividades defensivas" en el sur "de conformidad con el acuerdo", añadiendo que había "incautado y desmantelado varias armas y equipos militares de un almacén".
La tregua en el sur del Líbano entró en vigor el 27 de noviembre después de más de un año de hostilidades transfronterizas entre Israel y Hezbolá que comenzaron con el estallido de la guerra en Gaza.
Los intercambios de fuego finalmente escalaron hasta convertirse en una guerra total y la entrada de tropas israelíes en el sur del Líbano.
Desde que entró en vigor la tregua, ambas partes se han acusado mutuamente de reiteradas violaciones.
Mikati dijo que quería resolver cualquier cuestión relacionada con la Línea Azul -la frontera marcada por la ONU entre Líbano e Israel- "para que no haya justificación para ninguna ocupación israelí de nuestra tierra".
También dijo que estaba trabajando con "el Banco Mundial, la Unión Europea, los países árabes y nuestros socios internacionales para crear un fondo fiduciario" para los esfuerzos de reconstrucción.
El Banco Mundial estimó en octubre que los combates habían causado daños físicos por un valor de "al menos 3.400 millones de dólares" en Líbano.