En un comunicado, el grupo Hezbolá respaldado por Irán, “anuncia una transición a una nueva fase de escalada en la confrontación con el enemigo israelí, que se reflejará en los acontecimientos y eventos de los próximos días”.
El comunicado fue emitido después de que Israel dijera que las tropas mataron a Sinwar, pero no mencionó al jefe de Hamás.
Hezbollah dijo que “cientos de combatientes… están completamente preparados para contrarrestar cualquier incursión terrestre israelí en las aldeas del sur del Líbano”, y señaló que los ataques contra Israel han aumentado en los últimos días.
También dijo que sus ataques con cohetes continúan “incrementándose día a día”, y que “los de precisión… se están desplegando por primera vez”.
Anteriormente, el legislador Hassan Fadlallah dijo que el objetivo del comando militar de la organización terrorista es seguir luchando “con todos los medios disponibles” para evitar que Israel logre sus objetivos y finalmente acordar un alto el fuego.
“Nuestro objetivo hoy es poner fin a la agresión. No entraremos en detalles relacionados con el mecanismo o las soluciones”, dijo a los periodistas, cuando se le preguntó si Hezbollah todavía insiste en que solo dejará de luchar una vez que termine la guerra entre Israel y Hamás en Gaza.
Fadlallah también afirmó que Israel no ha podido avanzar más en Líbano, detener el lanzamiento de cohetes de Hezbollah o crear las condiciones para que sus ciudadanos regresen a las comunidades en el norte cerca de la frontera, que Israel convirtió el mes pasado en un objetivo de guerra oficial.
“Hasta ahora, el enemigo no ha podido tomar el control total de ninguna aldea”, dijo Fadlallah en la conferencia de prensa en el parlamento del Líbano.
Las fuerzas israelíes simplemente “destruyen, disparan y corren”, continuó, diciendo que los combatientes de Hezbolá están luchando contra tropas que han invadido territorio libanés por solo unos pocos “metros”.
Hezbolá había dicho que estaba involucrado en un combate cuerpo a cuerpo con las fuerzas israelíes cerca de la frontera mientras videos que circulaban en las redes sociales supuestamente mostraban banderas israelíes izadas en ciudades fronterizas libanesas.
AFP no pudo verificar de forma independiente la autenticidad de las imágenes.
Israel lanzó la ofensiva terrestre en el sur del Líbano semanas después de agregar a sus objetivos de guerra oficiales el regreso a casa de unos 60.000 residentes desplazados del norte. Temiendo un ataque de Hezbolá en el norte, Israel evacuó a los residentes poco después de que miles de terroristas liderados por Hamás irrumpieran en el sur de Israel el 7 de octubre de 2023, matando a casi 1.200 personas y tomando 251 rehenes, lo que desencadenó la guerra en Gaza.
Un día después, las fuerzas lideradas por Hezbolá comenzaron a atacar asentamientos fronterizos y posiciones militares casi a diario, y el grupo terrorista afirmó que lo hacía en apoyo de Gaza.
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El comunicado fue emitido después de que Israel dijera que las tropas mataron a Sinwar, pero no mencionó al jefe de Hamás.
Hezbollah dijo que “cientos de combatientes… están completamente preparados para contrarrestar cualquier incursión terrestre israelí en las aldeas del sur del Líbano”, y señaló que los ataques contra Israel han aumentado en los últimos días.
También dijo que sus ataques con cohetes continúan “incrementándose día a día”, y que “los de precisión… se están desplegando por primera vez”.
Anteriormente, el legislador Hassan Fadlallah dijo que el objetivo del comando militar de la organización terrorista es seguir luchando “con todos los medios disponibles” para evitar que Israel logre sus objetivos y finalmente acordar un alto el fuego.
“Nuestro objetivo hoy es poner fin a la agresión. No entraremos en detalles relacionados con el mecanismo o las soluciones”, dijo a los periodistas, cuando se le preguntó si Hezbollah todavía insiste en que solo dejará de luchar una vez que termine la guerra entre Israel y Hamás en Gaza.
Fadlallah también afirmó que Israel no ha podido avanzar más en Líbano, detener el lanzamiento de cohetes de Hezbollah o crear las condiciones para que sus ciudadanos regresen a las comunidades en el norte cerca de la frontera, que Israel convirtió el mes pasado en un objetivo de guerra oficial.
“Hasta ahora, el enemigo no ha podido tomar el control total de ninguna aldea”, dijo Fadlallah en la conferencia de prensa en el parlamento del Líbano.
Las fuerzas israelíes simplemente “destruyen, disparan y corren”, continuó, diciendo que los combatientes de Hezbolá están luchando contra tropas que han invadido territorio libanés por solo unos pocos “metros”.
Hezbolá había dicho que estaba involucrado en un combate cuerpo a cuerpo con las fuerzas israelíes cerca de la frontera mientras videos que circulaban en las redes sociales supuestamente mostraban banderas israelíes izadas en ciudades fronterizas libanesas.
AFP no pudo verificar de forma independiente la autenticidad de las imágenes.
Israel lanzó la ofensiva terrestre en el sur del Líbano semanas después de agregar a sus objetivos de guerra oficiales el regreso a casa de unos 60.000 residentes desplazados del norte. Temiendo un ataque de Hezbolá en el norte, Israel evacuó a los residentes poco después de que miles de terroristas liderados por Hamás irrumpieran en el sur de Israel el 7 de octubre de 2023, matando a casi 1.200 personas y tomando 251 rehenes, lo que desencadenó la guerra en Gaza.
Un día después, las fuerzas lideradas por Hezbolá comenzaron a atacar asentamientos fronterizos y posiciones militares casi a diario, y el grupo terrorista afirmó que lo hacía en apoyo de Gaza.