Una tercera herida grave en un mes por una bala de foam disparada por la Ertzaintza
Una mujer de 44 años ingresada en la UCI del Hospital de Donostia con hemorragia cerebral es la última víctima del posiblemente uso indebido de balas de foam por parte de la Ertzaintza. Se encontraba el 5 de marzo en una zona abierta, en la mediana que separa el Paseo de Errondo, buscando cobertura para poder descargarse la entrada online para acceder al estadio de Anoeta, explicó ayer su marido al diario de Noticias de Gipuzkoa. Resaltó que los agentes antidisturbios la dejaron tirada en el suelo “como a un perro”...