#2 De hecho vi un documental hace tiempo donde en varios institutos tomaron un grupo de adolescentes a los que les retrasaban las clases para que no madrugaran y otro que madrugara un poco más de lo habitual, a lo largo de un año, el grupo que no madrugada tenían mejores notas en matemáticas y comprensión lectora que los que madrugaban e incluso más que los estudiantes en horario tradicional