En caso de circular sin la ITV o con la ITV caducada, la sanción económica será de 200 euros, que se reducirán a la mitad con pronto pago.

En caso de circular tras intentar pasar la inspección y salir con resultado desfavorable la sanción es la misma: 200 euros o 100 con pronto pago.

Circular con la pegatina de la ITV en un coche que no la ha superado será considerado un delito de uso de certificación falsa.

O sea, sale más barato arrancar la pegatina que llevarla caducada.