De pequeño viví unos años en una comuna de jipis. No matábamos a las arañas, respetábamos a las ardillas, abrazábamos a los árboles, etc. Lo que hace la gente que realmente ama el campo y a sus criaturas. Bueno, pues cuando llegaba la temporada de caza todos los niños teníamos que estar dentro de casa o como mucho en el huerto que la rodeaba, porque eran escopetazos en cualquier momento, voces gritando, perros ladradando que en una de esas entraban como locos al huerto y estropeaban las alcachofas... Los cazadores no son gente de campo, son gente de pueblo (o señoritos de ciudad). Odio eterno a los cazadores.
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