Los coches de más de quince años de antigüedad eran en 2005 el 4% del total en España. En 2024 son el 42%. La marca más vendida hoy en España es Dacia, la misma que en Marruecos, Moldavia, Rumanía, Bulgaria y Bosnia.
La igualdad ratonil por abajo es la felicidad del tieso. Acostumbrado a vivir en el nivel de mera supervivencia, cualquier migaja del gobierno le parece al gusarapo español una señal de progreso.
Pero son esclavos voluntarios y piden más. Ahí, con su Dacia Sandero, sus zapatillas de treinta euros, su perfume de supermercado para los días de fiesta, su cerveza y su móvil pagado a plazos. Les invitas a una copa y se piden un combinado con Coca-Cola porque eso es todo lo que conocen. Son los nuevos pobres del siglo XXI. Tan pobres como los del XIX, pero con mucha menos dignidad: estos se arrastran frente al cacique.