#2 Ayer escuché el podcast, me dejó completamente destrozado.

En este país luchar por una custodia siendo mejor progenitor es absurdo, ya puedes presentar informes psicosociales incluso de asuntos sociales que no hicieron nada. Ahora ya si que no hay remedio, la pobre Laia ya no podrá ser salvada por su padre.

Todos estos padres destrozados, el de Laia, el de Olivia, ... siempre repiten las mismas palabras: Espero que este caso sea el último.
Pero no, ni esa voluntad como sociedad podemos cumplir.
Esta sociedad tiene otras estúpidas prioridades.