Sánchez pretende que paguemos a escote los compromisos con sus socios

El cupo pactado con ERC a cambio de la investidura de Salvador Illa suscita el rechazo de todos los barones autonómicos, salvo del catalán. De ahí que Sánchez haya intentado empezar a aclimatar a los presidentes regionales al trato de favor arbitrario concedido a Cataluña con una oferta a la que a priori podrían mostrarse más favorables. La condonación supondría además que el Estado asumiese una parte de esa deuda millonaria. Pero Sánchez no puede pretender que todos los españoles paguemos a escote el oneroso coste de los compromisos adquiridos