El dramaturgo Albert Boadella vuelve a la carga con "Joven, no me cabree", un diálogo desternillante para desmontar los mitos de la nueva modernidad y el
El titular es algo provocativo, pero en general dice cosas muy interesantes, sunque algunas nos pueden parecer discutibles.
Por cierto: el catalán, el finés y el eslovaco, todas tienen fecha de caducidad y antes las que hablan menos personas. Se murió el latín como lengua viva y mira que era útil.
#1 "Se murió el latín como lengua viva" Bueno, se transformó y adaptó en cada lugar mezclándose con el idioma local, de ahí las lenguas romances. Se podría decir que hablamos un latín evolucionado, irreconocible del original, pero heredado de él.
#1 Boadella vive de provocar, pero tiene gracia el cabroncete. Yo me tronché con un monólogo suyo que hablaba de la pureza de la sangre catalana, hasta que fueron invadidos por hordas de Garcías, de Martínez, etc.
P.- ¿Ha mejorado la relación con sus vecinos en Jafre (Girona)? Hubo un momento en que le lanzaban basura a su jardín.
R.- Ahora han parado. Su ánimo ha decaído, incluso puede ser que alguno piense que el Boadella tiene razón.
Muy demócratas esos independentistas vecinos suyos.
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