Por si sirve de algo yo probé la experiencia hace unos años, pero no llevaba falda larga sino minifalda, no exagerada pero mini.
Me fui con una amiga (estábamos de vacaciones) a una terraza y nos sentamos tan tranquilas al cabo de 20 minutos le digo que nos vayamos que era urgente, me miro como si viera la monstruo de las galletas y empezó a reírse, diciéndome que como nos íbamos a ir si acabábamos de llegar y yo que sí, que era necesario y ella me contestó que no se movía al menos en una hora más, al final le tuve que decir que se me había ocurrido no ponerme bragas y que me picaba ahí abajo, entonces sí me miró, pero no como al monstruo sino como si estuviera loca, me dijo que como se me ocurría, que estaba mal de la azotea y un montón de cosas más que no quiero recordar, al final nos marchamos y todo el camino hasta el apartamento me estuvo dando la turra.
Al final, después de ducharme y lavarme bien me puse las dichosas bragas y como la cosa no fue a más (quizá fue psicológico) no fui al ginecólogo, pero debo decir que la experiencias resultó tan desagradable que no volví a hacerlo, creo que si se inventaron fue para algo y no se me ha vuelto a ocurrir quitármelas, al menos debajo de la ropa para ir a ninguna parte.