#1 Me acuerdo de un caso, allá por 1985, en la Gran Via de Madrid. Estaba yo andando por allí (haciendo algún mal sin duda) cuando veo un taxi que se para frente a un hotel y van sacando equipajes que dejan en la acera. La puerta del pasajero abierta (imagino que andaban pagando o algo), así que en ese momento aparece por la acera un pollo sin pinta de botones de hotel y agarra una maleta, apenas la ha levantado un par de centímetros del suelo, cuando sale un brazo de grandes dimensiones desde la puerta del taxi, a una velocidad asombrosa para el tamaño, y agarra el brazo del maletero con una presión que me hizo daño incluso a mí que solo miraba. Y detrás del brazo aparece una alemana de un tamaño equivalente a la conocida Ofelia del Mortadelo pero en joven, y sin soltar el brazo se encara con el pavo que se debió cagar allí mismo. Cuando consiguió librarse salió por pies y quizá todavía no ha parado.