Acatamiento a la Ley de Dios
“La Nación española considera como timbre de honor el acatamiento a la Ley de Dios, según la doctrina de la Santa Iglesia Católica, Apostólica y Romana, única verdadera y fe inseparable de la conciencia nacional, que inspirará su legislación”. Francisco Franco Bahamonde, Ley de Principios del Movimiento Nacional (1958)