La República de la Piruleta necesita un martir
Pues sí, amigüitos. Acabo de ser señalado como persona non grata. Y todo por recordar amablemente a los indepes que unos señores profesionales con bastante mala leche y entrenados para no tener amigos, ni para buscar complicidades, vienen a velar por el orden constitucional y que por favor que procuren no hacer nada inconveniente que los quiero sanos y salvos. Veamos, os pongo en contexto por si habéis estado aislados en un bunker los últimos meses: un parlamento regional se le ha subido a la cabeza el mandato divino y se pasa por el arco del triunfo la constitución, que no olvidemos que…