El infierno de la pequeña Sara, maltratada por su padre hasta la muerte: "He matado a mi hija. La castigué legítimamente y murió"
AFP
Actualizado Lunes, 14 octubre 2024 - 20:33
Golpes, quemaduras, huesos rotos. Este lunes se han desvelado algunos detalles sobre las agresiones que sufrió Sara Sharif, una niña de 10 años cuyo cadáver se encontró el 10 de agosto de 2023 en la casa familiar, en Inglaterra. Según The Guardian, el cuerpo de Sara fue descubierto en una vivienda de Woking, Surrey, junto a una nota manuscrita de su padre que decía: "Juro por Dios que mi intención no era matarla. Pero la perdí".
Este lunes, en el primer día de juicio, se ha sabido que Urfan Sharif, de 42 años, huyó a Pakistán y desde allí llamó a la Policía británica para decir que la había matado. El progenitor está siendo juzgado en el Tribunal Penal Central de Londres acusado del asesinato de Sara Sharif junto con su pareja, Beinash Batool, y el hermano del padre y tió de la niña, Faisal Malik.
En la apertura del juicio, el fiscal Willam Emlyn Jones ha explicado a los miembros del jurado que el cadáver se encontró después de que su padre llamara a la policía desde Pakistán, diciendo: "He matado a mi hija. La castigué legítimamente y murió". También relató a la telefonista que no era su intención matarla, sino que la había "golpeado demasiado".
Pero el representante del Ministerio Público ha añadido que los tres acusados habían participado en una "campaña de abusos" contra Sara en las semanas previas a su muerte. Según recoge The Guardian, en su exposición ha detallado "la terrible verdad" revelada por la autopsia al cadáver de la niña. Los forenses concluyeron que a Sara le habían quemada con una plancha. Presentaba además, "probables marcas de mordeduras humanas", cinco en el brazo izquierdo y una en la cara interna del muslo. Las lesiones coincidentes en los tobillos de Sara sugieren que se le habría echado agua hirviendo "sobre ambos pies mientras estaban juntos", lo que, para los expertos, indica que estuvo atada y sujeta, quizá durante largos periodos.
"Cuando Urfan Sharif dijo en esa llamada: 'Le di una paliza', no estaba ni cerca de describir el alcance de la violencia y los abusos físicos que Sara había sufrido, no sólo en el momento de su muerte, sino repetidamente, a lo largo del tiempo. Había sido víctima de graves agresiones violentas y malos tratos físicos durante semanas y semanas, como mínimo. Los médicos encontraron docenas de lesiones, tanto externas como internas. Descubrieron que había sufrido contusiones extensas, quemaduras, huesos rotos, viejos y nuevos. Sara no sólo había recibido una paliza. En las últimas semanas de vida había recibido un trato atroz, brutal. Y en todo momento, estos tres acusados eran los adultos que vivían en la casa donde Sara había vivido, donde había sufrido y donde había muerto", ha expuesto el fiscal.
Urfan Sharif, Beinash Batool y Faisal Malik habían salido de Reino Unido con destino a Islamabad, la capital paquistaní, el 9 de agosto. La Policía de este país los encontró tras una exhaustiva búsqueda y los devolvió a Reino Unido. Fueron detenidos a su llegada al aeropuerto londinense de Gatwick y recluidos en prisión a la espera de juicio.
El fiscal considera "inconcebible" que uno de ellos actuara solo puesto que vivián en la misma casa. Ha descrito que cada uno de los sospechosos intentaba señalar a los demás. En el caso del padre, ha señalado que la madrastra de Sara era responsable de la muerte de la niña, y que él había hecho una confesión falsa para protegerla.
El jurado ha escuchado este lunes una grabación de una llamada telefónica realizada la tarde del 8 de agosto de 2023, el día en que se cree que murió Sara, en la que se oye a Beinash Batool preguntar por la reserva de un vuelo a Islamabad para cuatro adultos y cuatro niños.
En este primer día de juicio, el trío de acusados ha negado haber cometido un asesinato o haber causado o permitido la muerte de Sara. Está previsto que el juicio continúe hasta diciembre.
El padre de la niña, junto a los otros dos acusados, en una imagen distribuida por la PolicíaAFP (imagen adjunta):
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El infierno de la pequeña Sara, maltratada por su padre hasta la muerte: "He matado a mi hija. La castigué legítimamente y murió"
AFP
Actualizado Lunes, 14 octubre 2024 - 20:33
Golpes, quemaduras, huesos rotos. Este lunes se han desvelado algunos detalles sobre las agresiones que sufrió Sara Sharif, una niña de 10 años cuyo cadáver se encontró el 10 de agosto de 2023 en la casa familiar, en Inglaterra. Según The Guardian, el cuerpo de Sara fue descubierto en una vivienda de Woking, Surrey, junto a una nota manuscrita de su padre que decía: "Juro por Dios que mi intención no era matarla. Pero la perdí".
Este lunes, en el primer día de juicio, se ha sabido que Urfan Sharif, de 42 años, huyó a Pakistán y desde allí llamó a la Policía británica para decir que la había matado. El progenitor está siendo juzgado en el Tribunal Penal Central de Londres acusado del asesinato de Sara Sharif junto con su pareja, Beinash Batool, y el hermano del padre y tió de la niña, Faisal Malik.
En la apertura del juicio, el fiscal Willam Emlyn Jones ha explicado a los miembros del jurado que el cadáver se encontró después de que su padre llamara a la policía desde Pakistán, diciendo: "He matado a mi hija. La castigué legítimamente y murió". También relató a la telefonista que no era su intención matarla, sino que la había "golpeado demasiado".
Pero el representante del Ministerio Público ha añadido que los tres acusados habían participado en una "campaña de abusos" contra Sara en las semanas previas a su muerte. Según recoge The Guardian, en su exposición ha detallado "la terrible verdad" revelada por la autopsia al cadáver de la niña. Los forenses concluyeron que a Sara le habían quemada con una plancha. Presentaba además, "probables marcas de mordeduras humanas", cinco en el brazo izquierdo y una en la cara interna del muslo. Las lesiones coincidentes en los tobillos de Sara sugieren que se le habría echado agua hirviendo "sobre ambos pies mientras estaban juntos", lo que, para los expertos, indica que estuvo atada y sujeta, quizá durante largos periodos.
"Cuando Urfan Sharif dijo en esa llamada: 'Le di una paliza', no estaba ni cerca de describir el alcance de la violencia y los abusos físicos que Sara había sufrido, no sólo en el momento de su muerte, sino repetidamente, a lo largo del tiempo. Había sido víctima de graves agresiones violentas y malos tratos físicos durante semanas y semanas, como mínimo. Los médicos encontraron docenas de lesiones, tanto externas como internas. Descubrieron que había sufrido contusiones extensas, quemaduras, huesos rotos, viejos y nuevos. Sara no sólo había recibido una paliza. En las últimas semanas de vida había recibido un trato atroz, brutal. Y en todo momento, estos tres acusados eran los adultos que vivían en la casa donde Sara había vivido, donde había sufrido y donde había muerto", ha expuesto el fiscal.
Urfan Sharif, Beinash Batool y Faisal Malik habían salido de Reino Unido con destino a Islamabad, la capital paquistaní, el 9 de agosto. La Policía de este país los encontró tras una exhaustiva búsqueda y los devolvió a Reino Unido. Fueron detenidos a su llegada al aeropuerto londinense de Gatwick y recluidos en prisión a la espera de juicio.
El fiscal considera "inconcebible" que uno de ellos actuara solo puesto que vivián en la misma casa. Ha descrito que cada uno de los sospechosos intentaba señalar a los demás. En el caso del padre, ha señalado que la madrastra de Sara era responsable de la muerte de la niña, y que él había hecho una confesión falsa para protegerla.
El jurado ha escuchado este lunes una grabación de una llamada telefónica realizada la tarde del 8 de agosto de 2023, el día en que se cree que murió Sara, en la que se oye a Beinash Batool preguntar por la reserva de un vuelo a Islamabad para cuatro adultos y cuatro niños.
En este primer día de juicio, el trío de acusados ha negado haber cometido un asesinato o haber causado o permitido la muerte de Sara. Está previsto que el juicio continúe hasta diciembre.
El padre de la niña, junto a los otros dos acusados, en una imagen distribuida por la PolicíaAFP (imagen adjunta):
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Gracias @AshMostaza
12ft.io/https://www.elmundo.es/internacional/2024/10/14/670d5e8be85ece